Una reforma no se hace todos los días, por tanto, es muy importante pensarla bien. Antes de arreglar nuestro baño o aseo debemos pensar en sus características, tamaño, iluminación, quién va a utilizarlo, niños, adultos, personas mayores... y no perder de vista la comodidad, la usabilidad, la limpieza, o la estética.
Aquí te dejamos algunas ideas:
Paredes:
- Estamos acostumbrados a ver los baños recubiertos de baldosas, pero existen otros materiales. ¿Has oído hablar del microcemento? El acabado es precioso y totalmente diferente, se puede poner tanto en paredes como en el suelo y le da continuidad sin juntas.
- Si al final te decantas por las baldosas: ¿grandes o pequeñas? Las grandes y de colores claros que siempre dan sensación de más espacio. Quizás no se te había ocurrido que se pueden colocar desde arriba o desde abajo. Piensa qué parte de tu baño se ve más cuando entras.
- Combina diferentes tipos de baldosas utilizando por ejemplo una franja más oscura o con baldosas de menos tamaño en una esquina o en la zona de la ducha.
Suelos:
- Te recomendamos elegir pavimento de buena calidad. Puedes optar por colores oscuros o claros, pero intenta que se disimulen la suciedad, gotas de agua, pelo... que sean duro y resista el impacto de cosas que se caen.
Iluminación:
- En el baño estamos entrando constantemente por lo que apagamos y encendemos las luces muchas veces y por un tiempo reducido. Debemos conseguir una buena iluminación y pensar en el consumo.
- ¿Has pensado en poner una luz indirecta detrás del espejo?
- ¿Dónde tienes el interruptor de la luz? Si lo tienes fuera, en el pasillo, te recomendamos que lo metas dentro del baño. Con las manos, sobre todo los niños, ensucian la zona alrededor del interruptor y es más fácil limpiar un azulejo que una pared pintada.
- Varios interruptores nos permitirán encender sólo una parte del total y por ejemplo, tener la opción de iluminar más la zona del lavabo, donde necesitamos más luz en un momento dado.
- Piensa en los enchufes que necesitas; secador de pelo, maquina de afeitar, cepillos de dientes... te recomendamos al menos dos y cerca del lavabo.
Ser prácticos con los sanitarios:
- ¿Bañera o ducha? La ducha es más práctica, ocupa menos espacio, ahorrarás agua y es mucho más accesible para personas mayores.
- Si tienes dos baños en la casa puedes dejar bañera en uno de ellos y poner ducha en el otro. La bañera también es muy útil con niños pequeños o para darnos una sesión de relax de vez en cuando.
- ¿Mampara o cortina? Echa un vistazo a las mamparas de cristal a medida, quedan estupendas.
- ¿Utilizas el bidé? Ha estado ahí toda la vida, pero es un sanitario del que quizás puedas prescindir y quitarlo te permitirá obtener más espacio.
- El lavabo debe ser cómodo, podemos ponerlo con pedestal, medio pedestal o con cajones debajo para guardar y tener a mano todo lo que necesitamos.
- Los sanitarios suspendidos o los que llegan hasta la pared facilitan la limpieza ya que impiden que la suciedad se acumule por detrás.
Es muy posible que varias personas necesiten utilizar el baño a la misma hora:
- ¿Puedes separar el inodoro del resto de sanitarios?
- ¿Tienes espacio para poner dos lavabos?
- Pon un vinilo en la mampara de la ducha o una pared de ladrillos de cristal y tendrás intimidad
Sin olvidar la estética
- Espejos grandes que dan más sensación de espacio. Incluso puedes incrustarlos en la pared.
- ¿Qué te parece añadir unas esquineras metálicas?
- Un radiador toallero te ayudará a mantener la toallas secas y lo agradecerás en invierno
- Piensa dónde pondrás los toalleros
- Si tienes algún hueco en la pared puedes hacer unas bonitas estanterías de obra.
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